RODRIGUEZ BERMUDEZ MIROSLAVA C.
7 de Abril de 2010
Ensayo: CAPÍTULO 12 / EL SUTIL ARTE DE DETECTAR CAMELOS
¿Como saber si una afirmación es válida o no? ¿Cómo descubrir si una idea tiene o no un fundamento sólido que la soporte?
En la investigación científica – como la que intentamos iniciar en este posgrado- podemos encontrarnos con diversos dogmas o ideas preconcebidas y es de vital importancia poder contar con las herramientas que nos permitan desmenuzar el fenómeno hasta encontrar la verdad, sea esta de nuestro agrado o no. Para esto una mente abierta, critica y analítica es un ingrediente indispensable, así como un carácter escéptico que ponga en duda el mundo como lo conocemos.
A través de la historia se han tomado posturas radicales para afirmar o descartar hechos sin una fundamentación, ejemplos de esto pueden verse muy comúnmente en la religión y no porque sea en la única área en la que se de este fenómeno, sino que es donde más fácilmente se tiende a aceptar dogmas. Sin embargo también en la ciencia hay ejemplos. Basta recordar al Médico húngaro Ignaz Philipp Semmelweis (1818-1865) que fue condenado por sus colegas por atreverse a decir que existían microorganismos que eran los causantes de las infecciones y por ello era necesario contar con técnicas por las cuales se libraran a los objetos de cirugía de gérmenes, introduciendo el concepto de Asepsia como hoy la conocemos. Idea revolucionaria pero que le costó burlas y descredito de sus colegas más conservadores, aun cuando ya Antony Van Leeuwenhoeck (1632 - 1723) había inventado el microscopio y se hablaba de estos animálculos (bacterias). A pesar de su importante contribución Semmelweiss fue denigrado por sus colegas y murió olvidado en un manicomio de Viena. Y como este existen muchos otros ejemplos donde las posturas más cerradas retrasan el desarrollo.
El peligro de tener una postura radical es que genera un obstáculo para investigar y llegar al fondo de un tema en específico o explorar alternativas que generen más conocimiento, pues si se tiene una idea que se toma como absolutamente verdadera no tiene sentido ahondar en el tema.
Lo que es importante destacar aquí es el hecho de que es necesario hacer un esfuerzo por mantener una mente que sea capaz de cuestionarlo todo, sin dogmas, abierta a nuevas ideas y dispuesta a investigar y al análisis. Y como ya mencione, incluso si los resultados no son los esperados y no validan nuestra hipótesis pues podríamos caer en el vicio de justificar mas no fundamentar.
¿Ahora cómo podemos darnos cuenta que nosotros estamos cayendo en estos vicios? En este capítulo Carl Sagan menciona una serie de herramientas que nos podrían ayudar a identificar -no solo en los demás sino, en nuestros propios argumentos- falacias.
Algunas de estas herramientas son: siempre tener una confirmación independiente de los hechos, alentar un debate desde todos los puntos de vista, no darle mayor peso a la opinión de las “autoridades”, analizar las diferentes hipótesis, no casarse con una hipótesis solo porque es la nuestra finalmente está ahí para descubrir si es verdadera o no, tratar de cuantificar lo que se investiga, nuestro argumento debe funcionar para todo el planteamiento, tender a elegir la hipótesis más simple, cuestionar la hipótesis, en una experimentación tener grupos de control.
Así mismo menciona una larga lista de que no hacer y como reconocer falacias más comunes y peligrosas de la lógica y la retorica. Todo esto con el fin de identificar lo verdadero y poder tener las herramientas para descartar lo que no lo sea. Ante todo buscar la verdad. Para esto es necesario conocer el tema y todas las posturas que estén alrededor de este, visualizarlo desde diferentes perspectivas para poder terminar con una conclusión valida.
martes, 6 de abril de 2010
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