jueves, 25 de marzo de 2010

Lectura 4

JAIME GONZÁLEZ BÁRCENAS

24 de marzo del 2010Falling in science.

Lectura 4

“El lego definió como pienso hoy el mundo”. Jofish, 1986


Este es un muy disfrutable libro (se agradece). Entrañables historias que de tan cotidianas, podrían pensarse como menores: un pequeño enigma, armar un modelo, desarmar otro, pero que son experiencias que están en la base de la construcción de lo que somos, en lo que nos vamos transformado, en que ideas del mundo vamos construyendo según nos convertimos en adultos.Experiencias tempranas donde con la relación que establecemos con los objetos, se despierta el interés por la observación, se realizan descubrimientos y se desarrollan habilidades útiles para pensar mejor: pensar en tres dimensiones, pensar por partes pero viendo el todo, pensar en que se puede describir lo complejo de forma simple, etc.


¿Todos tendremos historias semejantes o solo unos cuantos? En nuestro grupo debe haber muchas. A mí, en mi niñez donde había tenido lupas y había coleccionado insectos en una caja de zapatos, me regalaron un microscopio. Aunque bien pequeño (esto me sorprendió ya que siendo adulto encontraba muy difícil observar a través del objetivo) lo conserve durante años e incluso lo herede a mi primer hijo. Con aquella "superpoderosa" ampliación de la realidad me dedique por un tiempo a la singular actividad, no muy popular, de descubrir y visitar, envases en mano, los charcos de agua sucia (puerca decía uno de mis hermano) con que podía cruzarme en busca de “muestras de estudio”. Descubrí, es decir vi por primera vez, muchos bichos a los que nunca identifique ya que me bastaba la observación de tan extrañas criaturas para sentirme maravillado, algunas me asustaban pero otras atrapaban mi atención por sus complejas y sorprendentes estructuras de colores brillantes y bellos, todo proveniente de un espacio oscuro, todo un misterio. Ya diseñador, muchos años después, en mi cara se dibujo una sonrisa, cuando conocí de la obra del original y excéntrico Luigi Collani, él decía que cuando trabajaba en alguno de sus proyectos y se encontraba necesitado de inspiración, recurría a su ¡microscopio! (evidentemente no era un juguete como el que yo tuve, sino una pieza en forma)


Divertido escuchar a Justine Marble, que en su niñez agrupa los objetos en aquello que destruía (desarmar es mejor) y otros con los que construía (a mí me gustaban los “bulbos” que quedaban a nuestra disposición cuando la televisión se descomponía: eran edificio futuristas, naves espaciales…) A Justine le intrigaba como esos aparatos hacían lo que hacían y quería encontrar en su interior como lo lograban. Dice: mi meta fue encontrar la simplicidad detrás de la aparente complejidad. Los aparatos complejos o sistemas están constituidos por otros sistemas. La forma más general de describir un sistema era también la más simple.

Curioso y exótico saber de un niño tímido y nómada, que vive en un circo, que no va a la escuela, pero que se descubre atrapado por un espectáculo de luces (yo tampoco olvido la primera vez en que estuve en un espectáculo con laser, ni otras demostraciones posteriores)

Refrescante y muy articulado relato de un ex niño coleccionistas del piezas de “lego”, Scott Brave, fascinado con los retos para resolver algún misterio. Como enfrenta sus construcciones “paso a paso”, siguiendo instructivos pero que interpreta no como un guía rígida o estrecha, sino más bien como “pistas” con las que aprendió a pensar analíticamente: concentrarse en un paso antes de abordar el siguiente, pero conservando una mitrada al todo, al final buscado. Dice Scott “aprendí a planear por adelantado”.

Yo también arme y desarme, yo también pasé horas en alguna construcción (teníamos “mecanos”). Entrañables tiempos de descubrimiento y maravilla. Al igual que los enanos, todos empezamos desde pequeños, ¿no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario