domingo, 21 de marzo de 2010

NO HAY PREGUNTAS ESTÚPIDAS


MACIEL REGALADO ARELI
23 de marzo de 2010.
Lectura #3
No hay preguntas estúpidas

Comienzo retomando una afirmación que me quedo grabada en el recorrido de la lectura de este texto…….“Aprender a aprender”, suena interesante, y absolutamente necesaria pero es una frase que es poco llevada a la práctica, cuando somos niños aprendemos de los que saben porque pensamos que ellos son los que siempre nos pueden sacar o resolver nuestras dudas, cosa que tal vez es cierta aunque no podemos olvidar la cantidad de aportaciones que les hacemos sin que lo noten y cuando somos adultos pensamos que sabemos y que lo que no sabemos no siempre es necesario investigarlo, muchas veces como bien lo dice el texto nos olvidamos de esas preguntas curiosas y por el MIEDO a decir no sé, pasamos por alto la importancia de ese conocimiento.


Quisiera recordar un poco el concepto de MIEDO, es increíble ver como los niños tal vez porque aun no conocen los resultados, o porque no han tenido experiencias previas negativas o desafortunadas, generalmente toman el riesgo de acción y de palabra, y la pregunta sería ¿porque ellos si se pueden darse el lujo de decir o hacer las cosas que quieren?, porque son capaces de sorprender con sus acción, por que se avientan de la bici , se suben a los juegos, prueban con error, se ensucian, levantan gusanos, comen y experimentan algunas cosas que nosotros los adultos consideramos impensables, y para mí la respuesta sería y ¿Por qué NO?, y más si recordamos una idea esencial, en algún punto cada uno de nosotros fue uno de esos niños SIN MIEDO, sin temores, y con una infinidad de dudas, porque hoy no nos detenemos un poco a hacer esa consciencia y pensar que no importa y no pasa nada si preguntamos, que no pasa nada si nos equivocamos pero sobre todo que no pasa nada si no sabemos, en realidad la cuestión sería muy sencilla, si tenemos dudas o nos equivocamos o no sabemos algo siempre podemos investigar. El problema es que ya no nos hacemos esas preguntas, tal vez por miedo a la burla o simplemente por flojera de no encontrar una respuesta mejor y entonces para que cuestionarnos.

Pues no, en ese caso creo que debemos ser siempre como niños en esta búsqueda de más saber y más hacer, y como la frase lo dice hay que aprender a aprender, cada día con cada acción, no debemos olvidarnos de este placer que nos da descubrir, siempre que experimento esta sensación de un saber nuevo o un conocer me lleno de un sentimiento que me hace querer más y no solo más para mi si no para los demás, no sé si a todos nos suceda pero en mi caso es así ,cuando aprendo tengo una necesidad imperante por transmitirlo , y considero que es bueno porque en esta mi búsqueda el compartir nos enriquece hacia dos caminos ida y vuelta.


Un poco adentrándonos en esta transmisión de la ciencia, considero que es responsabilidad del que sabe lograr que el que no sabe entienda y no al revés, muchas veces creemos que la gente debe ponerse a nuestra altura en conocimiento y desde mi perspectiva es una afirmación errónea, tenemos la responsabilidad de lograr que entiendan de una forma más sencilla y no lo digo por que sepa mucho pero sí creo que al tener mayor conocimiento tenemos un compromiso social mayor y que así como nos esforzamos en la búsqueda, lo debemos hacer en la difusión porque al final podríamos llegar a la afirmación “GANAR GANAR”, si yo aprendo gano si logro comunicártelo ganas.

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